Un jardín vertical de interior puede proporcionar multitud de beneficios, aquí vamos a ver algunos de ellos.
Estamos acostumbrados los jardines verticales de exterior, de grandes superficies verdes, a fachadas vegetales de gran tamaño, y no nos paramos a pensar nunca en lo significativo que puede ser para nosotros el hecho de tener un pequeño (o no necesariamente pequeño) jardín vertical interior, tanto en nuestra casa como en nuestro trabajo.
Si tienes dudas sobre la idoneidad de tener un jardín vertical en el interior de tu casa, vas a cambiar de idea pronto, en cuanto veas la gran cantidad de beneficios que produce:
1. Es práctico y barato de mantener
Un jardín vertical de interior es muy práctico de tener, ¿quien no tiene una pared libre en su casa? Aprovechar estas zonas para colocar un pequeño jardín vertical es muy buen idea, no ocupamos espacios útiles de la vivienda, es más, estamos generando un espacio verde nuevo, que antes no se estaba aprovechando.
El mantenimiento de estos jardines es económico y simple, en algunos casos basta con un riego manual a la semana, en otros con un programador sencillo podemos tener nuestro jardín regado. Por otro lado, no nos tenemos que preocupar de sustratos, macetas, platos, drenajes, etc, una vez colocado el jardín, ¡a funcionar!
2. Sirve para mejorar el ambiente
Un jardín vertical humedece el ambiente del interior de la vivienda, cosa que normalmente mejora la situación de confort. Si realizamos una correcta selección de especies para el diseño del jardín vertical podemos reducir el llado «síndrome del edificio enfermo», gracias a la capacidad de algunas plantas para purificar el aire y retener elementos químicos peligrosos. Esta propiedad la desarrollamos en un artículo anterior: 10 plantas purificadores de aire.
Si tenemos suficiente espacio para colocar el jardín vertical, también podemos mejorar la temperatura de la sala, mediante el Aire Acondicionado Vegetal, consiguiendo que sea la propia vegetación la que refrigere el aire hasta una temperatura adecuada.
3. Proporciona una belleza diferente
Los jardines verticales de interior aportan un extra de belleza a cualquier vivienda, generando un punto de atención inevitable. Además, imagina sentarte junto a uno de ellos, cerrar los ojos y respirar el olor a las flores y las plantas, ¿dónde se puede tener una sensación parecida? El efecto relajante es inmediato, sentarse y tener delante una superficie verde o de flores es una sensación inigualable.
4. Es muy flexible y dinámico.
El jardín vertical se puede plantar con un fin decorativo y hacer un diseño específico, o se puede plantar de forma salvaje y aleatoria, con plantas de poco volumen o plantas selváticas, con muchas flores y colores o muy sencillo. También se puede plantar con verduras, plantas aromáticas o cualquier otra planta comestible. Es decir, nuestro jardín vertical es un lienzo en blanco que vamos a decorar como necesitemos.
Y no solo eso, sino que además se puede cambien en función del momento, de nuestros gustos o de nuestras necesidades, cambiando unas plantas podemos cambiar el aspecto del jardín vertical en un momento.
Después de todo esto, si hemos conseguido que te interesen un poco más los jardines verticales, ya nos quedamos contentos.
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